Nuestros libros

miércoles, 19 de abril de 2017

MODERNISMO. Rubén Darío



POEMAS






A Margarita ( Azul )


Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...

Plural ha sido la celeste
historia de mi corazón.
Era una dulce niña,
en este mundo de duelo y de aflicción.

Miraba como el alba pura;
sonreía como una flor.
Era su cabellera obscura
hecha de noche y de dolor.

Yo era tímido como un niño.
Ella, naturalmente, fue,
para mi amor hecho de armiño,
Herodías y Salomé...

Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...

Y más consoladora y más
halagadora y expresiva,
la otra fue más sensitiva
cual no pensé encontrar jamás.

Pues a su continua ternura
una pasión violenta unía.
En un peplo de gasa pura
una bacante se envolvía...

En sus brazos tomó mi ensueño
y lo arrulló como a un bebé...
Y te mató, triste y pequeño,
falto de luz, falto de fe...

Juventud, divino tesoro,
¡te fuiste para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...

Otra juzgó que era mi boca
el estuche de su pasión;
y que me roería, loca,
con sus dientes el corazón.

Poniendo en un amor de exceso
la mira de su voluntad,
mientras eran abrazo y beso
síntesis de la eternidad;

y de nuestra carne ligera
imaginar siempre un Edén,
sin pensar que la Primavera
y la carne acaban también...

Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer.

¡Y las demás! En tantos
climas, en tantas tierras siempre son,
si no pretextos de mis rimas
fantasmas de mi corazón.

En vano busqué a la princesa
que estaba triste de esperar.
La vida es dura. Amarga y pesa.
¡Ya no hay princesa que cantar!

Mas a pesar del tiempo
terco, mi sed de amor no tiene fin;
con el cabello gris, me acerco a los
rosales del jardín...

Juventud, divino tesoro,
¡ya te vas para no volver!
Cuando quiero llorar, no lloro...
y a veces lloro sin querer...

¡Mas es mía el Alba de oro!






Juventud divino tesoro ( Cantos de vida y esperanza)




La princesa está triste ( Prosas profanas)

Libertad a través de la imaginación: La princesa se encuentra prisionera de los valores materiales —el palacio, la riqueza— pero puede liberarse, encontrar armonía y belleza en otro lugar remoto, al cual llega a través de su imaginación. Este tema se vincula con la actitud vital de los poetas modernistas quienes,  frente a un mundo positivista, industrializado, adoptan una postura poética evasiva y se encierran en una torre de marfil.
  Desencanto.
  Tristeza.
  Amor.
  La literatura como medio de evasión de la realidad.
  La poesía como arte de una “élite” culta.
  El poema trabajado como materia plástica.

Destacan dos símbolos; el jardín y la mariposa. Estos símbolos eran muy comunes en su forma de escritura y expresión .
El jardín es un símbolo que significa otro mundo, los autores como Rubén Darío lo enfocaban como un mundo fuera de la realidad en el que ellos eran los mejores, sin criticas de la sociedad. También hace referencia al catolicismo.
La mariposa es un símbolo para la libertad, pero lo que realmente significa es un cambio; la mariposa nace como gusano y después se “transforma” en mariposa, eso mismo buscaban los poetas, poder cambiar la escritura. También se basaban en cambiar lo “feo” en algo “bonito” como es el caso de la mariposa.

Hay algunos recursos literarios de forma ; en el primer verso podemos ver una interrogación retorica. Podemos encontrar personificaciones: “se desmaya una flor”, en el verso 6. También hay bastantes paralelismos: La princesa no ríe, la princesa no siente;" , verso 2 y 4, quiere ser golondrina,quiere ser mariposa," verso 4 y 2.






Lo fatal ( Cantos de vida y esperanza)


CURIOSIDADES DE RUBÉN DARÍO









No hay comentarios:

Publicar un comentario